En la penumbra de esta noche divina y prieta Sobre la tundra que puebla mi alma siempre despierta Se oye un lamento como preludio de las horas muertas Horas que pasan con la agonía de una muerte lenta Vuelve el silencio a vestirme de oro, mi santo Vuelve el recuerdo de mis abuelas a hacerme fuerte en la espera Vuelven los discos que me enseñaron a adorar la música Volvió mi padre después de 20 años Ay, si tú volvieras Si tú volvieras te vestiría de oro, mi santo Callaría las cosas para que tú puedas oír mi canto desesperado Si tú volvieras te vestiría de oro, mi santo Callaría las cosas para que pudieras oír mi canto desesperado ♪ Si tú volvieras te vestiría de oro, mi santo Callaría las cosas para que pudieras oír mi canto desesperado Si tú volvieras te vestiría de oro, mi santo Que se pare el mundo para que tu puedas oír mi canto desesperado