Con todo el peso del galán en las costillas Bien relamido y afeitado como pa baile Con los zapatos bien lustrado y con don aire Todo alisado y bien domadas las cosquillas Confiado en dar el gran asalto de boquilla Dejé el café y enveredé hacia el callejón Ella coqueta y como buena bataraza Se espolvoreaba los cachetes con rubor Rímel aquí perfume allá puro color Y el vestidito que era oferta de la casa Pronta pal golpe y con las manos en la masa Se retocó las uñas y bajó el farol Ella tranquila como todas esas noches En que el dolor inunda toda la ciudad Con la consciencia del que peca por venganza Y que el amor se brinda por la caridad Soñó con fuego, con pasión y con el taita Y se entregó sin oponerse a la misión Y aquel galán de pelo todo engominado Que por las tardes daba clases del honor Ahora caía en las trampas de la moza Que lo cinchaba entre el empuje y el rigor Jugando a ser el pata de bolsa más buscado Sin miedo al plomo del profundo despechado Mas el destino que la juega de callado Le puso precio a la cabeza de los dos Cuando el Don Juan sintió de pronto la portera Y el ovejero dio un saludo mimosón Es mi marido dijo riendo la doncella No me dijiste que él era el enterrador Salió hace rato con destino al camposanto Lo más seguro es que el velorio fracasó Y en el oscuro el guapo manoteó las pilchas Gorro, zapato y el trabuco del cajón Salí pal patio y gané el fondo hasta la calle Pa acomodarme me paré bajo un farol Y me mandé tal como estaba pa las casas Con el vestido de ella, rímel y de crocs