Está que aparenta ser feliz pero en realidad
No se lo cree ni él.
Aquel que pasea a su novia con un cascabel por si se pierde,
Y miente y se lo cree.
Esa madre preocupada al ver
Que su hijo llega más ciego que ayer.
Está el que sabe que puede y el que puede saber
Hay quien quiere pasar de todo y dormir bien.
Está ese que se cree el jefe y trata de ofenderte donde sea o
Infeliz por dentro y por fuera un mierda y luego está
Esa niña en busca del espejo de una puerta de cristal
Que refleje la luna llena.
Al otro lado un padre mira al cielo sin miedo en el hielo
De esa fría temperatura siente su anhelo.
Está en el que no se conforma
Con nada con la vida programada,
Pero nunca resulta nada como esperaba, no.
Y ese carpintero tiene clavos que clavar,
Pero el problema no es ese no,
Es que apenas queda madera que talar.
Es la imagen de la realidad al caminar,
Cuando la vida pasa rápida sin esperar.
Si no me queda fuerza voy a continuar,
Cada cual tiene su vida,
Sus movidas y tal La mujer que limpia el portal del incívico.
El hombre acomplejado, obsesionado por su físico
Está el característico señor que se apoya en la obra,
Pensando a solas, eso lo hago yo mejor de sobras.
Está el que vive eternamente porque cruza sin mirar.
La mujer que va a comprar a un sitio distinto el pan y
Ese niño que no va a la escuela porque su padre dice
Que bendice a los demás y que no quiere estudiar.
Está el que piensa antes de decir nada y el impulsivo
Que antes de abrir la boca va a cagarla por mil motivos.
Corre un perro suelto ahí fuera y su dueño
Va a sudar de lo que haga el perro en la acera.
El hombre acostumbrado a ser imprescindible, quiere ser libre.
La chica con carrera que para este puesto no sirve.
El que se tiñe las canas
Por miedo a envejecer, mientras la niña
Tiene prisa por crecer para exhibirse.
Está el que se desmorona
El que no es persona hasta que toma café,
El que se come las comas del libro mientras lee.
El que te busca la boca por no saber donde tiene los pies,
No sabe perder,
No seré yo quién te aconseje.
El tonto que hace relojes, el colmo de siempre,
Trabajar hasta que te echen.
Ese que no controla su vida y quiere controlar
La de los demás,
La que ya no derrama lágrimas desde que fue mamá.
Porque es mucho más fuerte, sabe lo que hay.
El que por servir la ley se cree un Jedai.
Esa familia que no ve mientras el tiempo se va
Tristeza me da que nos veamos
Más entre plantas de hospital.
Tres amigos me quedan de cientos que había
Cambien noches frías en partes por responsabilidad.
Los de la barra del bar con su cerveza
Y aquellos que gritaron con el gol de Iniesta
Al ganar el Mundial.
Es la imagen de la realidad al caminar,
Cuando la vida pasa rápida sin esperar.
Si no me queda fuerza voy a continuar,
Cada cual tiene su vida,
Sus movidas y tal