El viaje al interior de la consciencia empieza tarde, Con la sensación de pertenencia aalgún lugar Difuminándose a la espalda Se que ya estoy en camino por la sensación de calma Los sentidos, perdiendo significado La distancia ya no existe los relojes se han parado Como decido ignorar el tiempo, se me olvida Ya no siento movimiento solo siento bienvenida Piedras hacen ondas en el agua entre la magia y la ciencia, Flechas indicando la salida Símbolos y signos son mi herencia, Poco a poco pierden trascendencia son las leyes de la vida Se me olvida el egoísmo, Me digo adiós le digo a Dios cree tu en ti como yo creo en mi mismo Hasta un acto sin sentido vale de algo Si el arcángel se equivoca y el demonio es bendecido Pídele a la Virgen por mí, que yo no puedo Porque solo creo en lo que tocan mis dedos Dile al santo que te guarda, que soy ateo Y no le voy a rezar para que cumpla mis deseos Sabe Dios que yo sé que cuando duela No me acordaré de él, que no iré a ponerle velas No necesito milagros en días aciagos Ni respuestas para preguntas que no me hago La retina quemada de imágenes Marginales desde el agua fría del bautismo Valen más que mil palabras Pero no que mis palabras o que las palabras de un amigo ¿Quieres saber de los márgenes, De luces y sombras? apunta y dispara al objetivo Luego revela el carrete y sin ningún motivo Regala las fotos y quédate los negativos El momento previo al olvido, la paradoja Hojas que caen, cuerpos que caen de la cuerda floja Luces rojas en el recuerdo gotas que mojan Un presente ausente del que me siento fugitivo Un futuro alternativo, el eslabón perdido De esta cadena humana; duele porque estás vivo Muerte y resurrección del mensajero, Decimales no suman números enteros Pídele a la Virgen por mí, que yo no puedo Porque solo creo en lo que tocan mis dedos Dile al santo que te guarda, que soy ateo Y no le voy a rezar para que cumpla mis deseos Sabe Dios que yo sé que cuando duela No me acordaré de él, que no iré a ponerle velas No necesito milagros en días aciagos Ni respuestas para preguntas que no me hago Allá donde te lleve el viento, Dando vueltas y girando en constante movimiento Viendo mundo sin raíces que te aten Con los ojos bien abiertos fuera del escaparate Te pareceremos maniquíes, que locura Estar fuera de lugar y no cambiar de postura Posando con ropa de temporada Sobre un cuerpo de madera que ya no late por nada La tienda está cerrada y los complementos Van a juego con la falda y los sentimientos El día más intenso espera Tras el invierno a la nueva colección de primavera Tu que miras desde fuera y no ves posible Elegir ir de tiendas pudiendo ser libre Vivirás hasta el fin de los días con lo puesto Midiendo tu libertad por la esclavitud del resto Pídele a la Virgen por mí, que yo no puedo Porque solo creo en lo que tocan mis dedos Dile al santo que te guarda, que soy ateo Y no le voy a rezar para que cumpla mis deseos Sabe Dios que yo sé que cuando duela No me acordaré de él, que no iré a ponerle velas No necesito milagros en días aciagos Ni respuestas para preguntas que no me hago