Todo en ella encantaba, todo en ella atraía Su mirada, su gesto, su sonrisa, su andar El ingenio de Francia de su boca fluía Era llena de gracia como el ave María Quien la vio, no la pudo ya jamás olvidar Ingenua como el agua, diáfana como el día Rubia y nevada como margarita sin par Al influjo de su alma celeste amanecia Era llena de gracia como el ave María Quien la vio, no la pudo ya jamás olvidar Cierta dulce y amable dignidad la investia De no se que prestigio lejano y singular Más que muchas princesas, princesa parecía Era llena de gracia como el ave María Quien la vio, no la pudo ya jamás olvidar Yo gocé el privilegio de encontrarla en mi vía dolorosa, Por ella tuvo fin mi anhelar Y cadencias arcanas encontró mi poesía Era llena de gracia como el ave María Quien la vio, no la pudo ya jamás olvidar Cuánto, cuanto la quise por 10 años fue mia Pero flores tan bellas nunca suelen durar Era llena de gracia como el ave María Y a la fuente de gracia de dónde procedía Se volvió como gota que se vuelve a la mar.